Si hay algo que no podes negar es que DIOS te está llamando, y vos tenes que decidir si comprometerte con Dios o con las cosas que este mundo te ofrece. TOMA HOY LA DECISIÓN NO ESPERES MAS
FUNDACIÓN ECOS DE ETERNIDAD-
Dios pide que te consagres
“Si
alguno quiere venir en pos de mi, niéguese a sí mismo” (Lc.
9:23)
La pareja de
novios había salido a caminar. El muchacho estaba postergando su compromiso y
la joven estaba cansada ya de tanto esperar. De pronto llegaron a una joyería y
al acercarse a la vidriera la novia le señaló en determinada dirección. Allí
había una hermosa foto de un novio colocándole el anillo a la novia y debajo de
la imagen estaba un exhibidor que mostraba el anillo reluciente. El muchacho le
hizo una seña a su novia indicando que había interpretado la indirecta y le
pidió que fuera a mirar otra vidriera pues él debía entrar a la joyería. Cuando
llegó el momento en que estaban solos el muchacho le dijo que tenía una
sorpresa para ella. De una bolsa sacó un regalo… la foto de la vidriera.
¿La foto o el anillo? Hay
muchos que hacen lo mismo en el tema de seguir a Cristo. Ellos se quedan con el
recuerdo de un momento en sus vidas en lugar de comprometerse cien por cien con
el Señor. Ellos dirán “sentí la voz de Dios, me siento bien al estar en la
iglesia, en este lugar está la presencia de Dios” Y quedan con el lugar, el
sentimiento y la voz. Jesús declaró que el ser un discípulo implicaba negarse a
sí mismo, tomar la cruz y seguirle. La entrega es total. Tengo una foto de mi
casamiento, y me miro a mí mismo y veo que hay algunas canas, arrugas,
centímetros (hacia fuera) y kilos (hacia abajo) de más. Pero al mirar a quien
me acompaña encuentro que en verdad lo que importa es que seguimos juntos,
comprometidos el uno con el otro. ¿De qué sirve tener una foto de casamiento si
tu pareja te ha abandonado? Hermano, Dios quiere tu compromiso y fidelidad con
Él. Hay que dejar de mirar la foto y ser parte de ella.
¿Contado o en cuotas? La
entrega a Cristo no es una entrega en cuotas. Cristo se dio por entero. Debes
entregarte a ti mismo. No se trata de llevar colgada una cruz en tu cuello sino
de renunciar a tus derechos y aceptar el señorío de Cristo. Jesús llevó su
cruz, tú debes llevar la tuya. ¿Estás dispuesto a seguirle cueste lo que
cueste? Busca en tu Biblia Romanos 12 y léelo con cuidado. Versículo por
versículo. Mira las huellas de Jesús y decide seguirle. Sí. Cueste lo que
cueste. Él se puso el anillo de compromiso al morir en tu lugar… ¿Te pondrás el
anillo?
“Consagrarme
todo entero, alma vida y corazón. Es el íntimo deseo que hoy me anima buen
Señor. Heme aquí Señor, a tus plantas hoy. Pues a Ti consagrar quiero todo lo que soy. Amén”
No hay comentarios:
Publicar un comentario